Enfermedad de Alzheimer

Definición  La enfermedad de Alzheimer, una forma de demencia, es una afección cerebral progresiva y degenerativa que afecta la memoria, el pensamiento y la conducta.

La alteración de la memoria es una característica necesaria para el diagnóstico de ésta o de cualquier otro tipo de demencia. También se debe presentar cambio en una de las siguientes áreas: lenguaje, capacidad de toma de decisiones, juicio, atención y otras áreas de la función mental y la personalidad.

La velocidad de progresión es diferente para cada persona. Si la enfermedad de Alzheimer se desarrolla rápidamente, es probable que continúe progresando de la misma manera, pero si ha sido de desarrollo lento, probablemente seguirá un curso lento.

Nombres alternativos

Demencia senil de tipo Alzheimer (DSTA); Mal de Alzheimer

Causas, incidencia y factores de riesgo

Cuanto mayor sea la persona, mayor es el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, aunque no es parte del envejecimiento normal. Otro factor de riesgo común es el hecho de tener antecedentes familiares de la enfermedad.

abuelos Además de la edad y los antecedentes familiares, los factores de riesgo para esta enfermedad pueden ser, entre otros:

    * Presión arterial alta por mucho tiempo
    * Antecedentes de traumatismo craneal
    * Niveles altos de homocisteína (un químico corporal que contribuye a enfermedades crónicas como la cardiopatía, la depresión y posiblemente la enfermedad de Alzheimer)
    * Pertenecer al género femenino; debido a que las mujeres generalmente viven más que los hombres, tienen mayor probabilidad de desarrollar esta enfermedad

Existen dos tipos de enfermedad de Alzheimer: de aparición temprana y de aparición tardía. En la primera, los síntomas aparecen primero antes de los 60 años, es mucho menos común y es responsable de solamente el 5 al 10% de los casos. Sin embargo, tiende a progresar rápidamente.

La causa de la enfermedad de Alzheimer no se conoce por completo, pero se cree que abarca tanto factores genéticos como ambientales. El diagnóstico de esta enfermedad se hace sobre la base de síntomas característicos y excluyendo otras causas de demencia.

Se han descartado las teorías anteriores sobre la acumulación de aluminio, plomo, mercurio y otras sustancias en el cerebro que se creía llevaban a que se presentara esta enfermedad. La única forma de saber con certeza que alguien sufrió la enfermedad de Alzheimer es por medio de estudios microscópicos de una muestra de tejido cerebral después de la muerte.

El tejido cerebral muestra "nudos neurofibrilares" (fragmentos enrollados de proteína dentro de las neuronas que las obstruyen), "placas neuríticas" (aglomeraciones anormales de células nerviosas muertas y que están muriendo, otras células cerebrales y proteína) y "placas seniles" (áreas donde se han acumulado productos de neuronas muertas alrededor de proteínas). Aunque estos cambios ocurren en cierto grado en todos los cerebros con la edad, se presentan mucho más en los cerebros de las personas con enfermedad de Alzheimer.

Síntomas

En las etapas tempranas, los síntomas pueden ser muy sutiles y pueden parecerse a signos que muchas personas erróneamente le atribuyen al "envejecimiento normal". Entre los síntomas se encuentran uno o más de los siguientes:

    * Repetición frecuente de enunciados
    * Ubicación equivocada de cosas
    * Dificultad para recordar el nombre de objetos conocidos
    * Perderse en rutas conocidas
    * Cambios de personalidad
    * Perder interés por las cosas que antes se disfrutaba
    * Dificultad para realizar tareas que requieren algo de elaboración mental, pero que solían ser fáciles, como llevar el control de uso de la chequera, jugar juegos complejos (como bridge) y aprender rutinas o informaciones nuevas

En una etapa más avanzada, los síntomas son más obvios y pueden abarcar:

    * Olvidar detalles acerca de eventos corrientes
    * Olvidar eventos en la vida personal, perdiendo conciencia de quién se es
    * Problemas para escoger la ropa apropiada
    * Alucinaciones, discusiones, repartir golpes y conducta violenta
    * Delirio, depresión y agitación
    * Dificultad para realizar tareas básicas como preparar alimentos y conducir

En las etapas finales de la enfermedad, la persona ya no puede vivir sin ayuda. La mayoría de las personas en esta etapa:

    * Ya no reconocen el lenguaje
    * Ya no reconocen a los miembros de la familia
    * Ya no son capaces de desempeñar las actividades básicas de la vida diaria como comer, vestirse y bañarse

Signos y exámenes

El primer paso para diagnosticar la enfermedad de Alzheimer es establecer la presencia de demencia y, en segundo lugar, se debe aclarar el tipo de la demencia. El médico realiza la historia clínica, hace el examen físico (incluyendo un examen neurológico) y evalúa el estado mental del paciente.

Es posible que se ordenen exámenes para determinar si existe una condición tratable que pueda estar provocando la demencia o contribuyendo a empeorar la enfermedad de Alzheimer. Entre estas condiciones se pueden mencionar la enfermedad tiroidea, la deficiencia de vitaminas, los tumores cerebrales, la intoxicación por drogas o medicamentos, las infecciones crónicas, la anemia y la depresión severa.

Por lo general, la enfermedad de Alzheimer tiene un patrón característico de síntomas y los médicos experimentados pueden diagnosticarla teniendo en cuenta los antecedentes y el examen físico. Entre los exámenes que se hacen con frecuencia para evaluar o descartar otras causas de demencia están la tomografía computarizada (TC), la imagen por resonancia magnética (IRM) y exámenes de sangre. abuelo

En las etapas tempranas de la demencia, la imagen cerebral en las gammagrafías puede ser normal; mientras que en etapas posteriores, una IRM puede mostrar una disminución en el tamaño de la corteza cerebral o del área del cerebro responsable de la memoria (el hipocampo). Aunque estos exámenes no confirman el diagnóstico, sí excluyen otras causas de demencia como los accidentes cerebrovasculares y los tumores.

Tratamiento

Infortunadamente, no existe cura para la enfermedad de Alzheimer. Los objetivos del tratamiento son:

    * Disminuir el progreso de la enfermedad
    * Manejar los problemas de comportamiento, confusión y agitación
    * Modificar el ambiente del hogar
    * Apoyar a los miembros de la familia y otros cuidadores

Los tratamientos más prometedores abarcan cambios en el estilo de vida, medicamentos y suplementos antioxidantes como ginkgo biloba y vitamina E.

CAMBIOS EN EL ESTILO DE VIDA:

Las siguientes medidas pueden ayudar a las personas con enfermedad de Alzheimer:

    * Participar en un programa de caminatas supervisadas con un tutor u otra compañía confiable. Esto puede ayudar a mejorar las habilidades de comunicación y disminuir el riesgo de andar deambulando.
    * Utilizar la terapia de luz brillante para ayudar a reducir el insomnio y el deseo de deambular.
    * Escuchar música relajante que puede reducir los intentos por deambular y la inquietud, incrementar los químicos cerebrales, mitigar la ansiedad, aumentar el sueño y mejorar la conducta.
    * Conseguir un perro como mascota.
    * Practicar técnicas de relajación.
    * Recibir masajes regulares que son relajantes y suministran interacción social.

TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO:

Existen varios medicamentos disponibles para retardar el progreso de la enfermedad y, posiblemente, mejorar las capacidades mentales de la persona. La memantina (Namenda) actualmente es la única droga aprobada para el tratamiento de la enfermedad o mal de Alzheimer que va de moderada a severa.

Otros medicamentos abarcan: donepezil (Aricept), rivastigmina (Exelon) y galantamina (Razadyne, antiguamente llamado Reminyl) y tacrina (Cognex). Estos medicamentos afectan el nivel de un neurotransmisor en el cerebro llamado acetilcolina y pueden también causar náuseas y vómitos. La tacrina también produce una elevación de las enzimas hepáticas y debe tomarse cuatro veces al día, pero actualmente casi no se utiliza.

El Aricept se toma una vez al día y puede estabilizar o incluso mejorar las habilidades mentales de la persona; además, generalmente se tolera bien. El Exelon parece funcionar de manera similar y se toma dos veces al día.

Se pueden requerir otros medicamentos para controlar comportamientos agresivos, agitados o peligrosos, los cuales usualmente se administran en dosis muy bajas.

Puede ser necesario suspender medicamentos que empeoran la confusión, como analgésicos, cimetidina, depresores del sistema nervioso, antihistamínicos, pastillas para dormir y otros. Sin embargo, los medicamentos nunca se deben cambiar o suspender sin hablar con el médico.

SUPLEMENTOS:

El folato (vitamina B9) es esencial para la salud del sistema nervioso. Junto con algunas otras vitaminas B, el folato también es responsable de eliminar la homocisteína (un químico corporal que contribuye a la enfermedad crónica) de la sangre. En las personas con enfermedad de Alzheimer, se han encontrado altos niveles de homocisteína y bajos niveles tanto de folato como de vitamina B12 y, aunque el beneficio de tomar estas vitaminas B para la enfermedad de Alzheimer no está completamente claro, vale la pena considerarlo, particularmente si los niveles de homocisteína en el paciente están elevados.

Los suplementos antioxidantes, como ginkgo biloba y vitamina E, eliminan los radicales libres, productos del metabolismo altamente reactivos que pueden causar daño celular en todo el cuerpo.

La vitamina E se disuelve en la grasa, rápidamente entra en el cerebro y puede retardar el daño celular. En al menos un estudio bien diseñado de personas con enfermedad de Alzheimer, a quienes se les hizo un seguimiento durante 2 años, aquellas que tomaron suplementos de vitamina E tuvieron un mejoramiento en los síntomas comparadas con aquellas que tomaron pastillas placebo. Los pacientes que toman anticoagulantes, como warfarina (Coumadin), deben hablar con el médico antes de tomar vitamina E.

La ginkgo biloba es una hierba ampliamente utilizada en Europa para tratar la demencia, la cual mejora el flujo sanguíneo al cerebro y contiene flavonoides (sustancias de la planta) que actúan como antioxidantes. Aunque muchos de los estudios hasta la fecha han sido algo imperfectos, la idea de que el ginkgo pueda mejorar el pensamiento, el aprendizaje y la memoria en las personas con la enfermedad de Alzheimer ha sido prometedora. El ginkgo NO se debe utilizar si la persona toma medicamentos anticoagulantes como warfarina (Coumadin) o un tipo de antidepresivos llamados inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO).

Si se está pensando en tomar cualquiera de estas sustancias, primero se le TIENE que comentar al médico; y es importante saber que las hierbas y suplementos disponibles sin prescripción médica NO están regulados por la FDA.

APOYO EN EL HOGAR:

La persona afectada con la enfermedad de Alzheimer necesita apoyo en el hogar a medida que la enfermedad empeora. Los familiares u otras personas encargadas del cuidado pueden ayudar comprendiendo cómo percibe su mundo la persona con esta enfermedad. Deben simplificarse los alrededores del paciente y se le deben proporcionar recordatorios frecuentes, notas, listas de tareas de rutina o instrucciones para las actividades diarias. A la persona con enfermedad de Alzheimer se le debe dar la posibilidad de hablar sobre sus desafíos y de participar en su propio cuidado.

OTRAS MEDIDAS PRÁCTICAS:

La persona con la enfermedad de Alzheimer debe hacerse revisar los ojos y los oídos y, de encontrarse problemas, se pueden necesitar audífonos, gafas y cirugía de cataratas.

Las personas con esta enfermedad pueden tener requerimientos particulares en la dieta, tales como:

    * Calorías adicionales debido al aumento de la actividad física por la inquietud y el hecho de deambular.
    * Comidas supervisadas y ayuda en el momento de alimentarse, ya que las personas con esta enfermedad a menudo olvidan comer y beber y, como resultado de esto, se deshidratan.

El Programa de Retorno Seguro (Safe Return Program), implementado por la Asociación para el Alzheimer (Alzheimer's Association), exige que una persona con enfermedad de Alzheimer lleve puesto un brazalete de identificación. En caso de que el paciente salga a deambular, la persona encargada de su cuidado puede ponerse en contacto con la policía y con la oficina nacional del programa Safe Return, donde se almacena la información acerca de la persona y se comparte en toda la nación.

Con el tiempo, puede que el monitoreo y la asistencia durante las 24 horas del día sean necesarios para brindar un ambiente seguro, controlar las conductas agresivas o agitadas y satisfacer las necesidades fisiológicas. Esto puede incluir cuidado en el hogar, ancianatos y guarderías para adultos.

Grupos de apoyo

Ver grupos de apoyo para la enfermedad de Alzheimer con el fin de encontrar recursos e información adicional para personas con enfermedad de Alzheimer y para las personas que cuidan de ellos.

Expectativas (pronóstico)

El pronóstico probable es desalentador. El trastorno normalmente progresa en forma permanente y es común que se presente incapacidad total. La muerte normalmente sucede en un lapso de 15 años, por lo general, a causa de una infección o una insuficiencia de otros sistemas corporales.

Complicaciones

    * Pérdida de la capacidad para desempeñarse o cuidar de sí mismo
    * Úlceras de decúbito, contracturas musculares (pérdida de la capacidad para mover articulaciones debido a la pérdida de la función muscular), infección (particularmente infecciones urinarias y neumonía) y otras complicaciones relacionadas con la inmovilidad durante las etapas finales de la enfermedad
    * Caídas y fracturas
    * Pérdida de la capacidad para interactuar
    * Desnutrición y deshidratación
    * Insuficiencia en los sistemas corporales
    * Disminución del período de vida
    * Comportamiento dañino o violento hacia sí mismo o hacia los otros
    * Maltrato por parte de un cuidador demasiado estresado
    * Efectos secundarios de los medicamentos

Situaciones que requieren asistencia médica

La persona debe consultar con el médico si alguien cercano experimenta síntomas de demencia senil tipo Alzheimer.

Asimismo, se debe consultar si una persona con este trastorno experimenta un repentino cambio en su estado mental (un cambio rápido puede indicar otra enfermedad).

En caso de estar cuidando a una persona con este trastorno y el trastorno y su condición se deterioran a tal punto que ya no se la puede cuidar en casa, se debe hablar sobre la situación con el médico.

Prevención

Aunque no existe una forma comprobada de prevenir la enfermedad de Alzheimer, existen algunas prácticas que se pueden incorporar en la rutina diaria, particularmente si existen antecedentes familiares de demencia. Se debe hablar con el médico acerca de cualquiera de estas propuestas, especialmente aquellas que implican tomar medicamentos o suplementos.

    * Consumir una dieta baja en grasa.
    * Consumir pescado de agua fría (como atún, salmón y caballa) rico en ácidos grasos omega-3, al menos dos a tres veces a la semana.
    * Reducir la ingesta de ácido linoleico que se encuentra en las margarinas, la mantequilla y los productos lácteos.
    * Incrementar el consumo de antioxidantes, como los carotenoides, la vitamina E y la vitamina C, consumiendo muchas frutas y verduras de color oscuro.
    * Mantener una presión arterial normal.
    * Permanecer activo mental y socialmente durante toda la vida.
    * Pensar en tomar medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINES), como ibuprofeno (Advil, Motrin), sulindaco (Clinoril) o indometacina (Indocin). Las drogas estatinas, un tipo de medicamento normalmente usado para el colesterol alto, pueden ayudar a disminuir el riesgo de enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, se debe hablar con el médico acerca de los pros y contras de la utilización de estos medicamentos para la prevención.

Estas recomendaciones no nos aseguran que el Alzheimer no se presentará en nosotros, sino que tal vez la enfermedad se retrase más en aparecer. Como la enfermedad es cerebral, lo que mayormente debemos hacer es ejercitar nuestro cerebro.

  • Resolver crucigramas ayuda mucho a que el cerebro se ejercite. Pensar en qué palabras son las correctas para el crucigrama es ideal, por eso procuremos resolver al menos tres crucigramas a la semana. No tienen que ser de los más difíciles, pero tampoco de los más fáciles.
  • Los sudokus también son una muy buena manera de ejercitar nuestra habilidad cerebral. Para resolver un sudoku necesitamos mucho de estrategias y de concentración.
  • Tener un buen hábito de lectura es muy bueno, ya que el cerebro está en constante actividad. Tengamos siempre un buen libro en la mesa de noche y leamos mucho.
  • Armar rompecabezas también es muy estimulante para el cerebro. Tan solo el hecho de pensar dónde y cómo colocar las piezas hace ejercitar nuestro cerebro.

Agradecimientos: HOSPITAL CHRISTUS MUGUERZA